El delito de ser libre en la verdad
Peter Kopa, Praga, 15.5.2025
https://www.youtube.com/watch?v=ztPEiJQEqEg&ab_channel=CBNNews
Introducción al tema
Desde los albores de la historia, las autoridades de gobierno han buscado apoyarse en ciertos conocimientos para afianzar su dominio. Estos saberes al principio se movían dentro de la nube vaporosa de la superstición, de la magia y de la interpretación de los sueños. Era el tiempo de los adivinos y magos, cuyos oráculos han provocado todo tipo de abusos y guerras. El pensamiento filosófico griego sobre Dios, el mundo y el hombre ha supuesto un gran avance porque se atiene sólo a la razón y a la verdad. Luego, la civilización romana introdujo la ley y el derecho, inspirados en la sabiduría griega.
Estos dos pilares, fundidos en coherente unidad con la revelación, en la pujante Iglesia fundada por Cristo, ha sido el comienzo feliz de nuestra civilización judeo-cristiana que dio grandeza a Occidente : https://thinktanklatam.org/la-conciencia-como-libertad-ante-la-verdad/. Recién cuando sus bases realistas fueron cuestionadas por Descartes, el hombre como sujeto pensante abandonó el objeto del conocimiento extramental para centrarse en el sujeto o en el Yo: es el nacimiento del subjetivismo, que permite excogitar todo tipo de creaciones ideológicas para legitimar la voluntad del gobierno monárquico.
Una vez dejado de lado la evidencia inmediata, en la que se basa la verdad, se pierde también la libertad del pensamiento en las ciencias humanísticas, que fue siempre el más sagrado principio en las universidades, desde la Edad Media. Y así se explica que el ejercicio de la libertad haya llegado a ser delito, cuando toma la forma de una expresión religiosa que no gusta al estado. ¡Hoy vemos cómo la policía ha detenido a cristianos rezando delante de abortorios, en Inglaterra y hasta en la católica España! https://thinktanklatam.org/manipulacion-del-lenguaje/
El delito de la libertad
La libertad de expresión en política fue sofocada por la revolución bolchevique desde 1917, y después por el nazismo. Y lo mismo ocurrió hace poco, en la reciente pandemia del COVID 19, donde el estado no quiso seguir las indicaciones de la ciencia médica, imponiendo dogmáticamente una sola vacuna, en todos los países y en un mismo momento. Y hasta se han dado los mismos pasos como en la Rusia comunista o en la Alemania nazi: la persecución de los opositores intelectuales, periodistas, científicos y profesores, en la forma de echarles de sus puestos de trabajo o incluso metiéndolos en la cárcel.Son muchísimos lo que protestaron contra estos abusos de autoridad del estado, como Jordan Peterson, el presidente Trump y toda una pléyade de autoridades científicas en todo el mundo: https://thinktanklatam.org/barrington-declaration-against-the-lockdown/
Como ya he dicho arriba, nunca se persigue la libertad de pensamiento e investigación en el área tecnológico, sino sólo en el ámbito de las humanidades.
Pero la ciencia médica, basándose igualmente en datos y en las leyes biológicas, también ha sido sometida al dictado de la autoridad política en los anos de la pandemia COVID 19. Esta actitud la encontramos también en el trasfondo de la legalización del aborto y en los pasos que se van dando hacia la legalización de la eutanasia. Y toda esta orquestación para la esclavización del hombre la dirigen los globalistas, tirando de los hilos al amparo del secreto y del anonimato.
¿Qué países son los ´malos´?
No lo son los países menos relevantes, sino los países líderes, como la Rusia soviética y la Alemania Nazi. Actualmente se está librando la lucha contra los abusos del estado que promociona el presidente Trump en USA, persiguiendo, por ejemplo, las ideologías WOKE de corte globalista. Las élites que promueven esta agenda ideológica de Davos 2030 tienen sus agentes bien colocados en los puntos neurálgicos de la promulgación de las leyes, en el sector educativo y tantos más donde alcanza la influencia oficial del estado.
Así, ahora mismo el gobierno de USA está limpiando ideológicamente nada menos que la Universidad de Harvard y tantas más, a base de cortarles las ayudas estatales que reciben anualmente. Harvard recibía 2.4 mil millones, por ejemplo. En USA estamos excepcionalmente en una situación inversa, porque es el estado el que persigue los abusos que cometen las instancias no estatales, porque no se puede permitir a Harvard que imponga ella misma, como tal, los errores del Wokismo que precisamente abortan la libertad de expresión o la ´free speech´que ellos deberían defender, porque la libertad es la razón de ser misma de toda universidad.
Las ciencias y los científicos carecen de defensas
Los profesores, científicos e investigadores no tienen sindicatos ni estructura alguna que defiendan su libertad y sus legítimos intereses. Cuando terminó la II guerra mundial, los americanos y los rusos trataron de atraer para sí el mayor número posible de científicos, y no sólo para el desarrollo de armas, sino también químicos, médicos etc. Así, el padre de los cohetes VI y VII, que se disparaba desde Peenemuende a Londres, ha sido Werner von Braun, que sentó las bases de la cohetería americana. Es decir, que el ´brain power´ o la potencia cerebral es casi un valor tal, que de él depende el progreso tecnológico y humano. En otro orden de cosas, la continua fuga de cerebros que se produce desde países menos a más desarrollados es un problema lamentable. Pero parte de la culpa la tiene el país más pobre, porque no intenta retener sus propias capacidades científicas mediante programas específicos.
La gran culpa de los intelectuales
Intelectuales son generalmente los pensadores situados en las ciencias humanísticas, como el Derecho, la historia, la filosofía etc. Hace 70 años, el filósofo y sociólogo Raymond Aron (1905-1983) publicó su libro ´El Opio de los intelectuales´. Aron denuncia a los intelectuales de su tiempo de haberse vendido al pensamiento comunista. Jean Paul Sartre ha sido el adalid de este movimiento intelectual, que ha terminado por difundir la infección del marxismo en una buena parte del mundo. En sus años de juventud, Aron y Sartre eran muy amigos, pero luego Aron se fue distanciando del socialismo marxista, hasta apoyar al partido conservador de De Gaulle.
Aron ha denunciado la gran culpa moral que tiene cualquier intelectual cuando acepta las premisas de la ideología marxista. Es una responsabilidad de la que puede librarse sólo con un retorno abierto al pensamiento filosófico tradicional, que ha hecho grande a Occidente desde el siglo I. Estos intelectuales son directamente responsables por la aparición de las ideologías WOKE, porque cada una de ellas es una réplica del principio dialéctico marxista que consiste en oponer cualesquiera dos extremos con el fin de lograr su síntesis. Inicialmente han sido los extremos de ricos y pobres que daría lugar a la síntesis de la revolución proletaria que termina por poner los medios de producción en manos de un estado omnipotente y tiránico. Ahora se oponen ambos sexos, o el hombre contra la naturaleza, o la raza blanca contra la negra etc.