https://www.youtube.com/watch?v=sxmBR5RA-ew
The English version is at the end of this text
Peter Kopa, 19.2.2018 en Praga
La Doctrina Monroe
Hasta 1983, cuando tuvo lugar la última intervención militar de USA en Grenada, condenada inmediatamente por las Naciones Unidas como violación grave del Derecho Internacional, Norteamérica valoraba todo el continente americano como su zona de influencia, en la que hacía y deshacía cosas de orden político según sus propios intereses. Esta política, basada en la Doctrina de Monroe, proclamada en 1823, inmediatamente después del proceso de independencia de las naciones latinoamericanas del Reino de España y Portugal, proclamaba el principio de ´América para los Americanos´ , que siempre fue entendido ´para los Norteamericanos´. Se trataba de contrarrestar también injerencias de Inglaterra y Francia, que entonces dominaban con sus barcos el Caribe.
Esta doctrina hegemónica de USA ha ejercido una profunda influencia en la conformación de muchas naciones, sobre todo las del Caribe, como es el caso de Panamá, que se separó de Colombia después de la guerra de los mil días, bajo el patrocinio de USA, para luego construirse el canal de Panamá, de vital importancia para los intereses de Estados Unidos. En total se habían producido 25 intervenciones de país nórdico, abiertas o encubiertas. La oposición a este país no se hizo esperar, acusándolo de imperialismo americano, lo cual provocó volver la mirada hacia España y Portugal, en un momento en que ya no estaban en condiciones de prestarles una ayuda eficaz.
Ya no más lo de ´América para los Americanos´
Sobre este trasfondo histórico, el Ministro de Asuntos Exteriores de USA, Rex Tillerson, proclamó en Febrero 2018 en un encuentro público con estudiantes, antes de emprender su primera gira por México, Argentina, Perú, Colombia y Jamaica, que ´Latinoamérica ya no precisa de nuevas potencias imperiales, que busquen sólo su propio interés. Los USA ahora son distintos porque ya no buscamos acuerdos a corto plazo con resultados asimétricos, sino que buscamos aliados´.
Este pronunciamiento corrió como reguero de pólvora por toda Latinoamérica, hasta el punto de que pocos podían dar crédito a lo que leían en los medios de información, porque suponía por parte de los USA de terminar con el doctrina de Monroe, al menos a nivel de las intenciones, y porque significaba dar cierta satisfacción a los latinoamericanos por tantas palabras fuertes proferidas por el presidente Trump contra México y algunas naciones más.
Los chinos preocupan a USA
Esta nueva estrategia política hay que verla sobre el trasfondo de la creciente influencia china que no para de aumentar su influencia mediante todo tipo de acuerdos comerciales e inversiones importantes en infraestructura y aprovechamiento de recursos naturales. Si bien los chinos insisten en sus buenas intenciones de tratar a cada país de igual a igual, en base a ventajas recíprocas, basta mirar el comportamiento del gobierno comunista chino hacia sus países vecinos y a sus ciudadanos, guiados por una visión materialista en todo. En este caso viene bien recordar el sabio consejo de que es mejor mal conocido que el bien por conocer. No hay que olvidar que la China es un Capitalismo de Estado, que impone condiciones laborales durísimas en su territorio. Además, en un caso extremo, la China emplearía la fuerza de las armas de modo más brutal que USA, sobre toda desde la costa del Pacífico.
Nueva alianza de ambas américas
La mejor alternativa en bien de las américas es olvidar el pasado totalmente y mirarse como iguales. A estas alturas de la historia no tiene sentido que cada uno se esté mirando a su propio ombligo, haciendo inventario de los agravios que le infirió el otro. No es bueno recordarlo, excepto casos extremos como la entrada masiva de drogas a los USA, porque están matando allí diariamente unas 160 personas, sin contar las personas alienadas por toda su vida. A la inversa, los USA introducen sus productos en el sur en condiciones asimétricas etc. y con esto se podría seguir hasta el fin del mundo. En cambio, un nuevo estilo de entedimiento, en donde ambas partes se mantienen a la misma altura, podría suponer una serie incontable de ventajas para ambas partes, sobre todo a nivel humano y cultural, como la superación de la corrupción, la cooperación militar en defensa de intereses comunes, la cancelación de proteccionismos y barreras aduaneras, la apertura hacia inversiones en las zonas menos desarrolladas y una reglamentación generosa de circulación y residencia de personas en cualquier país. No olvidemos con el inmenso continente americano tiene una población total de casi mil millones de personas y los recursos naturales más abundantes y ricos del globo terráqueo.
Además hay otro hecho que aboga por tal alianza: la situación geopolítica de las américas, en un momento en que los USA está sometiendo a revisión crítica sus lazos con los países de los demás continentes, en base al criterio de ´’América first´, que con el tiempo podría entenderse como ´both americas first´.
SA is a country that has a large number of natural resources.
Una respuesta a “Latinoamérica, entre USA y China”
[…] la creación de una imagen propia positiva y sonriente. Especialmente los países latinoamericanos Latinoamérica, entre USA y Chinatienen que tener, cara al futuro, muchísimo cuidado para no seguir entregando a los chinos sus más […]