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https://www.youtube.com/watch?v=z_8PPO-cAlA
https://www.youtube.com/watch?v=8EVMIEGfmRo
Peter Kopa, Praga 15.4.18
Diagnóstico histórico
Los que vivimos en ambientes de mentalidad nórdica (en la parte norte de Europa) hemos sufrido hasta hace poco desde el desprecio hasta la ridiculización de la religiosidad, aduciéndose se siempre a la falacia de que el hombre racional moderno ya no puede creer porque por fin conoce las causas de todo. A esto se agregaba que así el hombre se ha liberado de los mitos y ha instaurado la cultura de la razón. Esta ilusión ha sido sistemáticamente inculcada desde la educación oficial, sobre todo en Alemania, Francia, Gran Bretaña y Austria. No así en los USA, donde la concepción racionalista y materialista de la vida nunca ha llegado a permear a fondo a la gran mayoría, profundamente creyente hasta hoy.
La consecuencia de fiarse sólo del razonamiento científico, que mediante experimentos se ha lanzado a encontrar la piedra filosofal de la felicidad perpetua en un mundo a ser redimido, en base a la errónea persuasión de que el hombre es en sí mismo bueno, y que por tanto sólo se trata de lograr un pacto social democrático, al estilo de Voltaire o Rousseau, para por fin poderse instaurar la armonía social para siempre, avalada por la democracia y el Estado de Derecho. Junto a esto se ha ido fomentando progresivamente el desprecio de la religión. Ya la la Revolución Francesa –un ejemplo entre otros- tenía la intención declarada de destruir para siempre a la Iglesia Católica, que se presentaba como el origen de todos los males. Esto mismo lo intentó a su manera Hitler y el comunismo, sin éxito.
El problema del apartamiento de Dios
Pero este modelo de negocio filosófico-racionalista nunca ha funcionado tal como había sido excogitado en los cenáculos jacobinos de la Revolución Francesa. Más bien se produjo una lamentable retrogradación cultural que provocó problemas nunca vistos anteriormente: las guerras crudelísimas de los dos últimos siglos, el fenómeno del ateísmo y del materialismo, la matanzas políticas en Rusia, las liquidaciones de judíos y nonatos (unos 50 millones desde 1900), y el erotismo exacerbado. Al difuminarse totalmente la concepción cristiana del hombre, ciertas élites ateas, que nos intentan mover como títeres, han propuesto incluso la libertad de sexo sin barreras morales, la libertad de elegir la propia identidad sexual y la equiparación del matrimonio homosexual al tradicional.
El que a pesar de todo nuestro maravilloso mundo siga funcionando relativamente bien se debe a que el ´mainstream´ no sigue lo que pregonan los medios y las redes sociales, sino que se fían de un sano sentido común. El triste espectáculo de los desastres a nivel personal está haciendo recapacitar a la gente en todo el mundo. Por ejemplo, los dramas provocados por la droga, por los destrozos en la familia, están clamando una protesta que se traduce en un retorno a la religiosidad, en una especia de búsqueda afanosa del paraíso perdido. Veamos cómo esto se manifiesta:
Manifestaciones del retorno a la fe
En el cine de Hollywood, ante el buen shock de ´La Pasión´, de Mel Gibson, los cazadores del lucro han descubierto en el público el gran nicho de mercado de la actitud religiosa del espectador. La primera productora en lanzar toda una ráfaga de películas favorables a la religión fue la Twenty Century Fox, con toda una serie de biografías de santos y santas. La fe cristiana está atrayendo y convirtiendo inesperadamente a muchas personas líderes en la sociedad.
Otro caso análogo es la película italiana ´Cuori Puri´, donde se presenta la belleza moral de la pureza de una chica joven. Y este mismo derrotero siguen ahora mismo varias películas más, como ˇL´ Apparition´, que profundiza en las apariciones marianas. Por supuesto que todas estas producciones, tienen una que otra escena no muy bien lograda para un cristiano bien formado en la fe, pero el balance es muy positivo, a diferencia de las películas anteriores sobre Jesús de Pier Paolo Passolini y Martín Scorsese, que se permiten un tono burlón y hasta blasfemo.
También en el teatro se están volviendo a desempolvar obras clásicas con profundos mensajes de fe, como por ejemplo ´Jedermann´ de Hugo von Hoffmannsthal, que ha vuelto al escenario, después de 100 anos, en el Festival de Teatro de Salzburgo. El argumento de fondo es que cada hombre, por más que haya vivido la mayor parte de su vida de espaldas a Dios, al final vuelve a él.
Otro fenómeno impresionante es el retorno a la fe en Rusia, donde el Estado mismo se preocupa de mantener, restaurar y construir Iglesias en todo el inmenso territorio de la Santa Rusia. Contra la sospecha de muchos, de que todo es táctica política, cabe oponer que aún en este caso, el bien que se hace produce frutos, al igual que cuando un labriego echa con rabia la semilla al surco, ésta traerá el mismo fruto que en el caso de una siembra bendecida. Y no podemos dejar de mencionar la difusión rápida de la fe cristiana en la China, donde se estima que en unos 12 anos podría haber 250 millones de cristianos. Análogamente esto está pasando, con sus más y sus menos, en toda el Asia y en los países árabes.
El retorno a la fe bien puede significar el punto de flexión de la secularización, entendida como consecuencia directa del racionalismo cientificista apuntado más arriba. Los indicios de este proceso son innumerables, ya predichos por el Papa Juan Pablo II, que en el siglo XXI habrá un retorno a Dios. Más indicios: Youtube, donde hay de todo, está teniendo cada vez más videos sobre la religión, si bien mucho de los cuales se presenten con aderezos sensacionalistas para provocar más visitas y más dinero para los autores de los mismos. Pero lo interesante es el fenómeno en sí. Basta poner en el buscador, por ejemplo, Dios, conversiones de árabes o judíos, fenómenos sobrenaturales, profecías, fin del mundo, demonio, masonería etc. etc., para que aparezcan decenas y decenas de videos.
El revulsivo de los ataques terroristas árabes
Hasta a estos acontecimientos cabe aplicar el proverbio de que no hay mal que por bien no venga. La persecución y decapitación de cristianos actúa culturalmente como un shock despertador de las conciencias, que lleva a indagar sobre la propia identidad religiosa. Si ellos abrazan el Corán y lo quieren imponer como sea en todo el mundo, ¿cuál es mi posición ante este desafío? Todo Occidente esta perplejo y crispado, saliendo poco a poco del shock en búsqueda de su propia identidad religiosa. Parece que poco a poco la historia misma está sepultando a los principios ingenuos de Voltaire y Rousseau, o de los filósofos idealistas alemanes como Kant, Fichte, Schelling, Hegel y Feuerbach, que son nada menos los precursores inmediatos de Karl Marx. El hombre occidental, precisamente por su liderazgo civilizatorio y cultural cara a todo el mundo, tiene que asumir ahora la responsabilidad de señalar una dirección de marcha, tiene que mostrar cómo y por dónde se puede salir del oscuro túnel de su materialismo ateo. Y el camino que se vislumbra es el retorno a la fe.
Esta colaboración está inspirada en una artículo aparecido en el diario suizo ´Neue Zuercher Zeitung´, de Martina Laeubli, el 31.3.18 en Suiza.